lunes, 14 de junio de 2010


Quizás exista en algún bosque escondido del Sur, algún alerce que fue testigo del mensaje del Cristo.Tendría ahora sólo unos 1980 años de edad.
Al que no ha abrazado una araucaria o un alerce, puesta su mirada en un volcán reflejado en un lago.Lo invito a hacerlo, no se arrepentirá.
Si eres practicante de Reiki o de alguna otra técnica de medicina alternativa por favor intenta practicar tu técnica con uno de estos colosos y pareciera que son ellos que te acarician y no tu a el.Su mansa lentitud bloquea la mente, la calma.Una experiencia que vale la pena vivir, sin duda.
Invito a los amantes de la vida que recorramos, compartamos experiencias de senderos, hojas y tormentas todas alimentadas de esta energía telúrica que guiará a la Humanidad desde acá, los Himalayas del Sur del Mundo.